NCN - No cuesta nada

No cuesta nada tomarse el tiempo para reflexionar en lo que uno quiere. No debería costar, por lo tanto, decir lo que uno quiere.

Está bien que a veces el timing, es decir, el manejo del tiempo, lo es todo... Pero la vida es taaaaan larga que vale preguntarse si un mes más o uno menos podrán cambiarlo todo. Si ese último esfuerzo, o si esa bala que parece de salva no será el tiro de gracia.

Yo no digo que sí, ni digo que no... digo que depende. A ver si están de acuerdo conmigo: "Depende" es una palabra maldita, porque deja abiertas las puertas de todos los pasadizos de un laberinto.

¿Qué quiero? ¿Lo quiero? ¿O es sólo un capricho?

La misma encrucijada puede plantearse en cualquier ámbito de la vida... Hagan la prueba, se van a dar cuenta de que es así, y no hay otra respuesta que valga que no sea la propia.

En lo personal, las respuestas surgen cuando miro atrás y adelante, arriba y abajo, a la derecha y a la izquierda. O sea que miro a todas partes, para ver qué me sirve, qué me pesa, qué me gusta y qué no me sienta bien.

Y si quiero cantar bajito, enamorarme, comer empanadas o todo lo antes mencionado, entonces lo hago (bueno, salvo porque no se canta en la mesa ni con la boca llena porque es mala educación y "nadie quiere a las chicas maleducadas").

Por otro lado, si quiero decir las cosas las digo (aún cuando nadie me esté escuchando... ok, especialmente cuando nadie me está escuchando). Lo mejor es no quedarse con el bocado en la boca, esperando que lo escupas o lo mastiques.

Just do it now... Por sí o por no, por empezar de cero o por los viejos tiempos. Si en una encrucijada no pasa "algo", entonces estamos condenados (todos los humanos) a ser seres altamente olvidables.

*NCN unir los verbos "pensar", "sentir" y "decir"*


*****

Ah, a todo esto... tampoco cuesta nada hacer click y pasar por Proyecto Nada ;)

No hay comentarios.: