¡No quiero tener un Facebook!

Fotolog, Blog, ICQ, Msn, IRC, Facebook, Twitter, Sonico, Hi5, Orkut, My Space, You Tube, Second Life, Small World....................


...y la lista sigue sin parar. Lo único que yo digo es: todos están ahí, disponibles para integrarme a la maravillosa comunidad virtual mundial, pero... ¿Y si no tengo ganas de estar "integrada"?


Una compañera me comentó hace un tiempo que ella se había hartado de la red social Facebook. Más precisamente, del puterío que se forma alrededor de la dudosa privacidad que ofrece el formato del sitio (un "chusmerío virtual", como diría una amiga).



Como ella, otra amiga y otro compañero de trabajo cerraron sus cuentas en la comunidad virtual que empezó siendo estrictamente para universitarios y terminó por ser un caldo de cultivo para PNT.


Ellos no le vieron el punto a ventilar todos su agenda de contactos, familiar y sus datos a personas que no son verdaderos "amigos". Error #1 del sitio... bastardear la palabra "Amigo" impunemente.


Sin embargo, yo todavía no puedo desistir del todo de mi cuenta en FB. Y esto no es un descargo propiamente contra el sitio creado por el norteamericano Mark Zuckerberg y fagocitado por Gô.ôgle/Multivac.


Me gusta poder contactar nuevamente personas que no veía hace mucho tiempo, me parece muy práctica la función para compartir fotos... siempre y cuando los álbumes sean "privados" y las pruebas de la jarana del sábado no terminen a la vista de contactos laborales.


Lo que me lleva al siguiente punto de la cuestión: no sólo se bastardeó la palabra "amigo", y se creó un torrente incontrolable de chusmerío, sino que además las comunidades se abrieron a toda clase de contactos, desde compañeros de trabajo, jefes o profesores hasta personas que se conocen aleatoriamente.


A raíz de este fenómeno, tengo que cuidarme de qué foto subo, qué mensaje pongo en el muro de otro usuario o qué hace mi mascota virtual, Gordi Gordon (¿?)


Reconozco que todo esto es difícil de hacer si cada 5 segundos se acualiza mi "mini - feed" para decirme que Fulano eligió a Batistuta como su ídolo argentino en la liga italiana y que Mengana hizo 587 puntos en el Pirat vs. Ninjas y ya es más o menos la capitana del navío (sólo para entendidos... Facebook es sectario).


En el fondo, tengo que reconocer que mi relación con la tecnología, y más específicamente con los sistemas de comunicación "persona a persona" por Internet, es de amor - odio. Amo como une a la gente, pero odio que la acote, limite, o mutile toda posibilidad de interacción "en vivo y en directo".


Y estoy harta de Facebook y su chusmerío.

1 comentario:

gonzaleandro dijo...

Muy de acuerdo con tus críticas argumentadas, ordenadas y desarrolladas.
Sobretodo con el gastado de la palabra "friend", sí; es casi como cuando viene alguna persona por la calle y te llama "amigo". "Eh, amigo". Todo bien chabón, yo te voy a escuchar, no hace falta tener que imaginar que sos mi amigo; sos una persona, con eso basta. Bueno, igualmente, contra-restando la posible hipocresía: ¿sabés para qué lo uso yo? Si acabo de conocer a una persona, me gusta buscarla en Facebook y curiosear todos los álbumes de fotos. Para conocer, creo se entiende, que es distinto de "chusmear" (recolectar información sesgada para crear un pre-juicio). Digamos: lo hago de curioso.
Facebook, libro de caras, es una plataforma cibernética que satisface y alimenta las necesidades y deseos de aquellas personas que se sienten suficientemente megalómanas y grandiosas como para considerar que cualquier detalle de sus vidas es merecedor de un constante registro público-exhibicionista. Bueno, es una opinión, no es la única, pero siguiendo tu hilo de juicio, va por ahí.